Una madre denunció el asesinato de su hijo, quien fue interceptado por delincuentes mientras trabajaba en la parroquia de Petare, Caracas. Carolina Alonso no imaginó que la llamada del muchacho a pleno día sería la última que recibiría, con la que logró alcanzar a escuchar las últimas palabras del joven baleado.
Redacción Venezuela al Día
“Yo recibo una llamada telefónica de mi hijo, diciéndome ‘mamá, me tirotearon’. (…) Los amo mucho, los amo a todos”, fueron las últimas palabras de Gerardo Abreu, de 25 años de edad, después de haber recibido tres disparos mientras trabajaba. Su madre indicó que él era Técnico Superior en Finanzas, pero debido a que no conseguía trabajo, se tuvo que dedicar a mototaxista.
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Una de las balas que recibió atravesó unos documentos que llevaba en la mano, su cédula y su licencia para conducir. “Los muchachos que se gradúan no tienen mucha posibilidad aquí en el país de conseguir un trabajo digno. Tienen que rebuscarse con cualquier otra cosa que le pueda dar sustento”, sentenció Alonso.
Indignante como matan a TSU que no conseguía trabajo y no tuvo otra opción que ser mototaxista pic.twitter.com/y4FZlHQXY4
— Tommy Turner (@TommyTurner41) May 18, 2017
