Neomar Lander no volverá a participar físicamente en una protesta contra Nicolás Maduro. Aunque antes de este 7 de junio fueron muchas a las que se presentó, la violencia desmedida en el país, la represión sin contemplación por parte de la Guardia Nacional Bolivariana y la Policía Nacional Bolivariana contra los jóvenes que manifiestan su descontento con el régimen dictatorial que pretende aplicar el sustituto de Hugo Chávez, cegaron para siempre el ímpetu, la fortaleza y la esperanza de este muchacho.
Alessandro Coppola / Venezuela Al Día
Salió de casa con un escudo de cartón que él mismo realizó, en el llevaba escrita la frase “Yo soy libertador”, su esperanza por ver un país que en sus 17 años no conocía lo obligaba a enfrentarse a las fuerzas represoras de Maduro. Jamás imaginó que este miércoles sería su última protesta, sus ojos se cerrarían y enlutarían a toda una nación.
Hoy el país se conmueve con su muerte, despide a un joven guerrero que dejó todo en el “campo de batalla”. No cabe duda que luchó con convicción, ganas, “bolas” y sobre toda mucha esperanza, para lograr de esta manera cambiar la realidad fatal por la que atraviesa el país.
A continuación anexamos imágenes del fotógrafo Ipaniza, en las mismas se observa la lucha inalcanzable de Neomar desde que el país decidió declararse en resistencia:
Lander dio ejemplo de que solo con entereza, valor y cariño hacia un país se llega a ser héroe.
A pesar de conocer los asesinatos que se habían presentado en marchas anteriores, Neomar con convicción seguía tomando las calles, soñando con una mejor Venezuela.
Tal y como lo hicieron los libertadores del pasado, el joven de 17 años batalló en cada una de las protestas. Se mantuvo en el frente, con coraje y con una que otra arma casera se enfrentó a un gigante que se vio apocado ante tanta valentía.
Murió como un héroe, nos dejó como un protector, y lo recordaremos como un hermano de lucha que hasta el final dio su vida, incluso por lograr obtener lo que tanto esfuerzo le costó a los venezolanos en el pasado, la libertad, misma que hoy pretenden arrebatarnos…
Vuela alto Neomar… QEPD.