Las proyecciones sobre la cotización del dólar no oficial para finales de 2017 se tendrán que recalcular ante el alza significativa que ha experimentado en los últimos meses.
Esta semana, el paralelo alcanzó un nuevo tope al cerrar el jueves entre 8.100 a 8.600 bolívares de acuerdo a informaciones de páginas web y mesas de dinero. Su empuje ha sido tal, que en tan sólo seis días sumó Bs 1.000 cuando esta misma cantidad se había demorado anteriormente en unos 15 días.
Varios son los motivos por los cuales el dólar no oficial continúa su alza, entre ellos, destaca el cambio del Simadi al Dicom cuyo esquema de asignación pasó de ofertas diarias a subasta de divisas una vez a la semana, los montos considerados por las empresas aún muy bajos para sus necesidades de compra de insumos, la poca oferta de dólares y la desconfianza en la política del control de cambio.
Pero otra causa también ha impulsado el precio del paralelo: el incremento en el financiamiento del Banco Central de Venezuela a la estatal Pdvsa.
De acuerdo a las estadísticas oficiales, el BCV aumentó en 52,4% los préstamos a la petrolera entre enero y hasta el pasado 26 de mayo, al pasar de 5,6 billones a 8,6 billones de bolívares.
Analistas explican que al Petróleos de Venezuela obtener el financiamiento en bolívares del ente emisor, lo utiliza para cancelar compromisos con sus proveedores y contratistas en el país, por lo que éstos a su vez se volcaron al mercado paralelo a comprar dólares para resguardar su patrimonio.
La gran cantidad de recursos en bolívares ante una escasa oferta de divisas y de bienes, impacta al alza los precios de los productos. Hoy en día, desde golosinas, bienes de aseo y de cuidado personal y hasta productos alimenticios pueden conseguirse en el mercado local a un precio equivalente en bolívares de un dólar.
Un dato significativo lo aportan las cifras dadas recientemente por la firma Ecoanalítica, las cuales señalan que durante el primer trimestre de 2017 las empresas del sector privado importaron 1.000 millones de dólares y de este monto 42,7% ($430 millones), fueron financiados a través del mercado paralelo. Resaltó que esta proporción aumentó con respecto al mismo período de 2016, cuando 34% de las compras externas se realizaron con dólares propios.
Esta situación hace previsible un impacto en la inflación que según las estimaciones se coloca hasta abril a una tasa anual entre 500% y 800%.
