La masacre del exfuncionario y activista junto a seis de sus compañeros que luchaban en contra de la dictadura, conmocionó no solo a la sociedad venezolana sino a la comunidad internacional donde incluso Maduro fue catalogado como “El Carnicero”.
Redacción Venezuela Al Día
Un grupo de manifestantes alzó su voz en contra del expresidente Luiz Inácio Lula Da Silva, quien precisamente se enfrenta este miércoles al veredicto sobre su vínculo con la corrupción, decisión que marcará su destino en las próximas elecciones presidenciales.
Los opositores al exmandatario colocaron en un barco en el Lago Guaíba, al muñeco Pixuleco vestido de presidiario alusivo a la pena de prisión a la que podría ser sentenciado Da Silva, al tiempo que lucieron el tricolor y varios carteles entre ellos con el nombre del expiloto venezolano Óscar Pérez, masacrado por el régimen junto a sus compañeros el pasado 15 de enero en el sector El Junquito.
Posteriormente, a través de su cuenta en Twitter, cuerpos de seguridad informaron del retiro de los objetos y carteles en la embarcación en Porto Alegre, recordando que se encontraba en un perímetro de seguridad.
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La comunidad internacional ha repudiado el acribillamiento de los siete jóvenes disidentes del régimen a quienes se han tildado de “terroristas”, pese a manifestar públicamente su intención de entregarse a las autoridades y salvar la vida de los civiles presentes, un hecho que evidenció la vocación dictadorial y violatoria de los derechos humanos de la gestión de Maduro.