Los venideros comicios presidenciales están plagados de artimañas beneficiosas para el Gobierno. Un proceso que se supone debería tener garantías electorales, ha sido cuestionado porque ya ha dado indicio que será un hecho manipulado por personeros del Gobierno para comprar conciencias y ganar votos.
Redacción Venezuela Al Día
Desde que la asamblea nacional constituyente aprobó el decreto para adelantar las elecciones presidenciales antes del 30 de abril, beneficiaros de las bolsas CLAP (Comité Local de Abastecimiento y Producción) se dirigen con más frecuencia a la sede del Consejo Nacional Electoral en Plaza Venezuela para inscribirse en el registro electoral o tramitar un cambio de centro de votación, afirmó un funcionario del ente comicial.
El clientelismo respalda campaña electoral de Maduro
Además, según los propios ciudadanos que relataron al diario El Nacional, deben calarse tres horas “o más” de colas para cambiar su centro de votación. Ya que los consejos comunales lo están exigiendo para que sigan percibiendo la caja de comida, pues de lo contrario se lo quitarán.
“Es obligatorio que voten en la zona, si no les quitamos las cajas. Divulguen la información, sobre todo al chavismo”, sería parte del mensaje que reciben los ciudadanos.
“Yo voto en la parroquia El Recreo del municipio Libertador, pero está lejos de mi casa aunque en la misma parroquia. Me obligaron a reubicarme porque los del consejo comunal quieren tener el control de quiénes están votando en los centros más cercanos”, afirmó un señor.
Los afectados alegan que los están obligando a votar por Nicolás Maduro de lo contrario les quitarán los beneficios, sin embargo alegan que todo beneficio es intermitente. “A veces si , a veces no, y así estan como todo. Cumplen pero no siempre, por eso una cosa es que exijan que votemos pero la otra es que lo acatemos”, aseguró otro señor que no quiso ser identificado por seguridad.
“Yo voy a votar porque es mi aporte al país, pero no lo haré por Maduro”
Nicolás Maduro carga sobre sus hombros la miseria del pueblo, hambre, crisis económica, social y política, pero en vez de solventarlos, se ha dedicado a empeorarlos y amenazar a la población para ganar la reelección. “Quiero arreglar mi problema porque necesito el dinero y también votar para ver si este año esta gente se va. En la casa nos dicen que debemos votar por Maduro y uno solo responde que sí. Realmente no queremos”, añadió un muchacho.
Dijo que él también recibe mensajes con frecuencia del consejo comunal para recordarle que su voto debe ser para Maduro, pero cuando pide dos bolsas porque en su casa hay dos familias se las niegan.
Juan Carlos Caldera, representante electoral de Primero Justicia, advierte que las amenazas de los consejos comunales “forman parte de la estrategia del régimen para someter electoralmente al ciudadano a cambio de tener acceso a algún beneficio del Estado”.
Una lucha
Se tiene previsto que este lunes el CNE anuncie la fecha oficial para celebrar las presidenciales, y aunque el Gobierno tiene todo listo para iniciar la campaña, la oposición venezolana sigue estando acorralada por cada paso sucio que da el madurismo. Mientras los venezolanos, algunos dudosos de votar y otros con la seguridad que hay que hacerlo, se enfrentan a un proceso que podría estar mas que salpicado por “manos peludas” al servicio del régimen y darle la victoria.
