En Michigan en Estados Unidos, un hombre recibió una sentencia de 7 años y 3 meses de prisión por su intento de hackear el sistema informático de la cárcel del condado de Washtenaw para intentar que su amigo fuese liberado antes del tiempo estipulado.
Konrads Voits de 27 años además de la condena por el hackeo recibió una multa de 235.488 dólares americanos luego de que se declarara culpable. Voits creó y puso en marcha un programa para acceder al sistema informático de prisión y lograr su cometido.
Su sitio que se llama ‘ewashtenavv.org’, era bastante parecido al original de la prisión ‘ewashtenaw.org’ y con este nuevo dominio empezó a enviar correos a muchos de los empleados de la prisión para que comenzaran a familiarizarse con el portal y para que con su número de identificación y su clave accedieran al sitio y le brindaran al hacker sus datos para entrar en el sistema principal.
Por un tiempo lo intentó pero ninguno de los empleados cayó en la trampa, así que buscó otra manera de sacar a su amigo de prisión. Se hizo pasar por un trabajador informático y llamó al número de los empleados para ayudarlos a instalar una actualización que supuestamente requería el sistema interno.
Finalmente logró engañar un empleado para que instalara el software. Luego robó los nombres de usuario y las contraseñas de los empleados de la prisión y datos de más de 1.600 trabajadores del gobierno que le aparecían en el sistema.
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El hacker cambió la información del registro de su amigo para que lo liberaran antes de tiempo, pero un empleado notó que había una diferencia entre la información escrita a mano y el sistema, por lo que llamaron a agentes del FBI y sin mucho indagar dieron con Voits.
La agencia de noticias Associeated Press afirmó que según funcionarios del FBI el hacker tenía un talento increíble en sistemas pero que lo estaba utilizando de la peor forma. Muchas veces estos mismos hackers son empleados por entes gubernamentales o no gubernamentales luego de que se descubre su talento y luego de que cumplan su condena o paguen la fianza.
