Siempre se ha indicado que los medicamentos deben consumirse por prescripción médica, lo que beneficia a algunos, puede matar a otros,sin embargo, hay medicamentos recomendados por médicos y especialistas que pudiesen crear mas problemas en el organismo de los pacientes que la cantidad de beneficios que llegan a aportar.
Redacción Venezuela al Día
El diclofenaco, un fármaco que se comercializa también bajo marcas como Voltaren, Dolotren o Solaraze, está relacionado con un aumento del 50% en el riesgo de sufrir infartos o ataques al corazón en personas que lo toman con respecto a quienes consumen otros analgésicos. Este es el resultado de un estudio a gran escala con datos de 6.300.000 pacientes y que publica el British Medical Journal.
Este antiinflamatorio no-esteroideo (AINE) ya había sido objeto de alertas en los últimos años. El Reino Unido prohibió su venta sin receta y laAgencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS)advertía en 2012 del mayor riesgo cardiovascular observado en este fármaco con respecto a otras alternativas para el tratamiento de dolores musculares, articulares o dentales según ha publicado El Español.
Además, los investigadores comprobaron que el riesgo aumentaba con cada año que el paciente continuase con el tratamiento, independientemente de su edad y sexo.
De media, sufrieron un infarto o ataque al corazón más que los que tomaron ibuprofeno o naproxeno, tres veces más que los consumidores de paracetamol, y cuatro veces más que los miembros del grupo de control que no tomaron ninguna medicación.
Finalmente, su uso se ha relacionado con un aumento de casos de sangrado gastrointestinal. “Ha llegado la hora de reconocer el riesgo potencial que supone el diclofenaco y reducir su uso” – concluye el investigador jefe, Morten Schmidt. “No debería comercializarse sin receta, y cuando se prescriba, debería contener un aviso apropiado en la caja para avisar de los riesgos potenciales”.