Sin duda alguna que en todas las épocas de la vida republicana del país se ha podido apreciar abundancia en cuanto a casos de proselitismo e ideologización de las masas de un pueblo que se desea afín a los designios del poder. Pero cuando se toma en la agenda crear terror y zozobra en las mentes de niños en plena formación, ya estamos en presencia de un crimen.
Redacción Venezuela al Día
Luis Beltrán Prieto Figueroa, insigne educador venezolano, llegó a escribir en su momento una obra bautizada como “El maestro eunuco político” apuntando hacia el tema de la peor forma de castración que puede existir; La castración mental.
Eso pareciera ser lo que ha ocurrido con los integrantes del magisterio venezolano en los tiempos recientes. La resignación y dejadez pareciera haber tomado un sitial de honor en las mentes de quienes están encargados de formar a las nuevas generaciones.
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Sujetos a salarios de miseria y con unos plazos de pago que no permiten nada más allá de la supervivencia, los maestros en Venezuela parecieran mas bien una legión de zombis incapaces de reaccionar ante los designios que les privan de un salario digno y beneficios ganados mediante contratación colectiva.
Pero un caso aún más patético y doloroso ha ocurrido durante un acto de entrega de bolsos tricolor en el Liceo Nacional Bolivariano profesor Ramón Martínez en el municipio Machiques, un grupo de estudiantes manifestó su descontento con el régimen de Nicolás Maduro. Ante esto Damelis Chávez, jefa de la Zona Educativa del estado Zulia, dio un discurso a los menores, manifestando opiniones acerca de una posible intervención de Estados Unidos, Juan Guaidó y la ayuda humanitaria, publica La Verdad.
La jefa de Zona Educativa se trasladó a subregión Perijá con el objetivo de entregar los bolsos. Mientras se efectuaba la ceremonia decidieron grabar un vídeo corto, donde los alumnos debían levantar sus morrales y decir “gracias, Presidente”. Sin embargo, algunos estudiantes no querían hacerlo y cuando comenzaron a grabar, un joven gritó “viva Guaidó”.
Chávez se molestó e inició un discurso, donde reprendía a los alumnos por esa conducta y los calificaba como “engañados” por las “mentiras publicadas en las redes sociales, como Instagram y Facebook”.
La educadora recalcó a los estudiantes que en caso de venir una guerra “los primeros lugares donde caerían bombas serían las escuelas y los hospitales. Cuando se desate una guerra ustedes creen que van a ser santos en su tierra, o cuando pasen los aviones van a tirar una bomba a los chavistas. Entonces uno está aquí defendiendo al que es y al que no es chavista”.
Lo que no asimilan este tipo de “educadores” es que es muy diferente crear conciencia en un pueblo desde los hechos que se viven a tratar de imponer un pensamiento “a pesar de” todas las carencias y pobreza que ha generado ese pensamiento en el país a lo largo de dos décadas de corrupción e improvisación.
Y lo resulta aún mas grave es tratar de inocular su “chavismo” en unas mentes que están apenas en formación y que son enviados a los centros de enseñanza a recibir formación y no a verse sometidos a este tipo de actividades que vulneran los derechos de esos niños según lo establecido en leyes tales como la LOPNA.
Con información de Desireé Casserino / La Villa del Rosario / [email protected]