La Ley Antibloqueo busca que los activos expropiados por el régimen venezolano puedan ser objeto de “alianzas” con privados, que es lo que busca Maduro con Lácteos Los Andes.
Vía Primer Informe
El nuevo negocio entre Venezuela e Irán involucra la entrega por parte de Maduro de Lácteos Los Andes, una de las compañías emblema de Venezuela y que el chavismo expropió y quebró.
La relación comercial entre Venezuela e Irán sigue creciendo mientras la República Islámica se mantenga prestando apoyo al régimen de Nicolás Maduro.
Es una privatización disimulada a través de comodato de 15 años», señaló el legislador de la Asamblea Nacional Guillermo Palacios, citado por El Pitazo.
Palacios agregó que «un grupo iraní se hará cargo de la empresa en función de la aplicación de la Ley Antibloqueo»
El diputado denunció la apertura que quiere hacer el régimen de Caracas a la empresa privada entregando empresas estatales expropiadas en el marco de la Ley Antibloqueo.
Según este medio, el régimen tiene planeando desde septiembre la entrega de Lácteos Los Andes a un grupo iraní.
Una ley indefendible
La ilegítima ANC aprobó a principios de octubre una norma que da a Maduro la potestad para desechar leyes “cuya aplicación resulte imposible o contraproducente” debido a las sanciones de Estados Unidos a Venezuela.
La ley busca que los activos expropiados por el régimen venezolano puedan ser objeto de “alianzas” con
privados.
Asimismo, la ley declara “secretos y reservados” lo que surja de su aplicación, con miras a no someterse a ningún control. Tampoco fija mecanismos para rendición de cuentas y solo la Contraloría madurista tendrá acceso a la información.
Palacios aseguró que todas las instalaciones, centros de distribución y filiales de la empresa forman parte de la operación irregular.
Denunció que lo mismo ocurre con el Central Azucarero Pío Tamayo y Agropatria, entregadas a consorcios privados bajo la figura de comodato.
Otra de las denuncias del diputado opositor fue la ola de despidos masivos en Lácteos Los Andes.
“Los trabajadores podrían ser liquidados porque los inversionistas no van a asumir las deudas laborales», aseguró una fuente dentro de la empresa.
«Ya está sucediendo en el Central Azucarero Pío Tamayo”, dijo el empleado certificando la información de Palacios.
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