El alivio económico y una vacuna se acercaban más a la realidad el miércoles para frenar una pandemia de coronavirus que ha devastado la economía de Estados Unidos y ha matado a 286.487 personas, aunque se calcula que las reuniones de fin de año llevarán a otro aumento en los contagios.
Vía: Reuters
La Cámara de Representantes tenía previsto votar el miércoles un proyecto de ley de financiación provisional de una semana que permitirá ganar tiempo para llegar a un acuerdo sobre el alivio del COVID-19, con paquetes de ayuda diferentes por más de 900.000 millones de dólares sobre la mesa.
Se necesita ayuda con urgencia, ya que Estados Unidos registró un promedio de 2.259 decesos y 205.661 nuevos casos diarios durante la semana pasada.
Parte del debate del Congreso involucra la ayuda a gobiernos estatales y locales. Además de la pérdida de millones de empleos en el sector privado, estos gobiernos han despedido a casi 700.000 trabajadores este año, según datos del Ejecutivo, lo que equivale al 8,4% de la fuerza laboral.
Las vacunas podrían comenzar este mismo fin de semana, posiblemente aliviando la presión de un sistema de salud que se tambalea bajo un récord de 104.200 hospitalizaciones.
Pfizer Inc superó otro obstáculo el martes cuando la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) publicó documentos que indicaron que no se hallaron señales de alerta sobre la seguridad o eficacia de la vacuna que desarrolló con la alemana BioNTech SE.
“Parece que la vacuna es segura, al menos a corto plazo”, dijo el doctor Daniel Culver, jefe de medicina pulmonar de la Clínica Cleveland.
Un panel de asesores externos se reunirá el jueves para discutir si recomienda la autorización de uso de emergencia de la vacuna de Pfizer por parte de la FDA.
El asesor jefe del programa de desarrollo de vacunas “Operación Warp Speed” del gobierno de Donald Trump dijo que la primera inyección en Estados Unidos podría administrarse el domingo o el lunes.
“La FDA podría aprobar la vacuna el viernes o el sábado”, dijo Moncef Slaoui a Fox News el martes. “Enviaremos la vacuna en 24 horas y, tal vez en las 12 horas posteriores a la llegada a los sitios de vacunación, los primeros sujetos podrían ser inmunizados, algo que podría suceder el domingo o quizás más probablemente el lunes”.
Estados Unidos necesita urgentemente una nueva herramienta, dado que muchos estadounidenses se niegan a seguir los consejos de los expertos médicos y se niegan a usar mascarillas o a evitar las multitudes.
En Arizona, uno de los 14 estados sin un mandato de llevar mascarilla, las autoridades sanitarias informaron el martes de más de 12.000 nuevos casos de coronavirus, eclipsando el récord anterior de 6.799 del 5 de diciembre.
Alabama, que junto con Arizona está entre la mitad de estados que no han promulgado nuevas restricciones durante el último alza del virus, también registró un número récord de casos el martes, al igual que Ohio, según un análisis de Reuters.
Los expertos y las autoridades esperan un aumento de casos, hospitalizaciones y muertes tras la festividad del Día de Acción de Gracias, cuando muchos estadounidenses viajaron para estar con familiares y amigos. Ese ciclo podría repetirse después de las reuniones festivas de fin de año.
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