La Cámara de Representantes de Estados Unidos podría enviar tan pronto como el viernes una acusación de impeachment en la que se acusa al expresidente Donald Trump de incitar a la insurrección al Senado, que debe decidir su destino y si le bloquea la posibilidad de aspirar de nuevo al cargo.
Vía: Reuters
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Una fuente familiarizada con la planificación dijo a Reuters que la Cámara podría transmitir el artículo de destitución que aprobó la semana pasada tan pronto como el viernes y el número dos del Senado, Dick Durbin, dijo que lo esperaba “en uno o dos días.”
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, declinó responder a las preguntas de los periodistas sobre cuándo presentaría la acusación, un preludio necesario para iniciar el que sería el primer juicio político en el Senado a un presidente tras dejar el cargo.
Con el nuevo presidente Joe Biden presionando para que el Senado confirme rápidamente a los nominados del gabinete y para que el Congreso apruebe un proyecto de ley de ayuda contra el coronavirus, Durbin dijo el jueves a la MSNBC que los demócratas “tendrán que decidir cómo trabajar en un calendario muy ocupado, pero es una prioridad.”
Durbin también dijo a los periodistas en el Capitolio que aún no se ha determinado si el Senado celebrará un “juicio completo con pruebas y testigos” o un procedimiento “acelerado”.
En una votación de la Cámara de Representantes la semana pasada, el republicano Trump se convirtió en el primer presidente de la historia de Estados Unidos en ser destituido dos veces. Le acusó de incitar el mortífero ataque del 6 de enero en el Capitolio, un intento fallido de evitar que el Congreso certificara formalmente la victoria de Biden.
Los demócratas, que tienen la mayoría en la Cámara de Representantes, tomaron el control del Senado por un estrecho margen el miércoles, pero se necesitan al menos dos tercios del cuerpo de 100 miembros para condenar a Trump. Se necesitaría otra votación para impedir que se presente de nuevo a las elecciones.
Según las normas del Senado, el juicio comenzaría un día después de que la Cámara presentara la acusación. No estaba claro, sin embargo, si un retraso podría ser diseñado, como algunos demócratas han insinuado, para mantener la agenda y los nombramientos de Biden en el camino.
Algunos republicanos del Senado han argumentado que el Congreso no debe someter a juicio a un ex presidente y que hacerlo dividirá aún más al país.
El líder de la minoría de la Cámara de Representantes, el republicano Kevin McCarthy, dijo a Fox News: “Creo que el presidente Trump sigue teniendo esa capacidad de liderar este partido y de unir”.
Pero Pelosi dijo: “No creo que sea muy unificador decir: ‘Oh, olvidémoslo y sigamos adelante’. Así no se unifica”, dijo.
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